El cambio climático nos afecta a todos, y cada vez lo hace de forma más rápida e intensa. Y, principalmente, por culpa del ser humano. Estas son las principales conclusiones del nuevo informe del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático, IPCC, por sus siglas en inglés.
El sexto informe de evaluación, basado en el análisis de unas 14.000 publicaciones científicas (y que puedes leer aquí mismo), señala que el calentamiento global ya afecta a todas las regiones del planeta. Algunos de estos cambios no tienen precedentes (hemos alcanzado de nuevo récords climáticos) y otros son ya irreversibles. Olas de calor, incendios, inundaciones… Los fenómenos meteorológicos extremos son más frecuentes e intensos.
Sin embargo, aún estamos a tiempo de ralentizar algunos de estos efectos e incluso de detenerlos antes de que sean más graves. La solución sigue siendo, tal y como señalan los expertos, la reducción a gran escala y de forma inmediata de los gases de efecto invernadero, especialmente del CO2.
Somos los responsables del calentamiento global
El nuevo informe del IPCC sobre el cambio climático lo deja claro: somos los responsables del calentamiento global. El ser humano es el principal impulsor del incremento de las temperaturas medias y de la multiplicación de las olas de calor, las fuertes precipitaciones y las sequías, además del aumento de los ciclones tropicales y la disminución del hielo marino del Ártico y la reducción de la capa de nieve y el permafrost.
La evidencia es ya tan abrumadora que no hay duda científica. La concentración de gases de efecto invernadero en la atmósfera ha provocado el aumento de la temperatura global. Un incremento que surge a raíz de la actividad humana. Hemos emitido cantidades de CO2 muy por encima de nuestras posibilidades (y las del planeta). En tan solo unas décadas hemos liberado el CO2 correspondiente a millones de años. Si quieres saber más sobre este tema, puedes leer este artículo.
Además, por primera vez el IPCC destaca el papel del metano en el cambio climático y afirma que este gas, procedente sobre todo de la ganadería, es responsable de alrededor del 30% del calentamiento desde la era preindustrial.
Lo más destacado de este asunto es que, como resultado, la temperatura de la Tierra ya es más de un grado superior a la de los comienzos del siglo XX. 1,1° C que están teniendo consecuencias devastadoras.
Cambios climáticos históricos e irreversibles
El tiempo se ha agotado y algunos efectos del calentamiento global son ya irreversibles. El escenario que tenemos ante nosotros es alarmante, por eso es necesario actuar de inmediato. En el propio informe del IPCC sobre el cambio climático podemos encontrar un atlas interactivo que nos muestra cómo será la Tierra en 2050 si no conseguimos frenar el aumento de las temperaturas.
Lo cierto es que nos enfrentamos a cambios sin precedentes que no han tenido lugar durante miles e incluso millones de años:
- En 2019, las concentraciones de CO2 atmosférico fueron las más altas en al menos 2 millones de años.
- En los últimos 50 años, la temperatura de la superficie global ha aumentado más rápidamente que en cualquier otro período durante al menos los últimos 2000 años.
- Durante la década de 2011 a 2020, el área de hielo marino del Ártico alcanzó su nivel más bajo desde al menos 1850.
- El nivel del mar ha aumentado más rápidamente desde 1900 que en cualquier siglo anterior en al menos el último 3000 años. De hecho, si sigue aumentando al ritmo de los últimos años, en 2100 la subida del nivel del mar podría alcanzar los 40 centímetros. Y eso siendo optimistas. En el peor de los escenarios, sería de 80 centímetros.
- Desde 1960 los sumideros de carbono naturales (los bosques, la tierra y los océanos) han absorbido el 56 % de todo el CO2 que la humanidad ha emitido. Sin embargo, esos sumideros de carbono están perdiendo su capacidad de absorber carbono a medida que los vamos destruyendo.
Conclusiones
La temperatura seguirá aumentando hasta al menos mediados de siglo. De acuerdo con las previsiones del IPCC, el calentamiento global será de entre 1,5 ° C y 2 ° C a mediados de siglo. Y eso si dejamos de emitir CO2 a la atmósfera. De no ser así, el incremento será de 4,4° C.
La mitigación del cambio climático requiere de urgentes y ambiciosas reducciones de las emisiones de gases de efecto invernadero. Existen diferentes maneras de conseguir esto. Desde la reducción del consumo energético, la mejora de la eficiencia energética o la transición hacia un modelo de consumo energético renovable, hasta el desarrollo de mecanismos financieros que cambien nuestra manera de producir y consumir.
El plan para alcanzar la neutralidad en carbono debe implicar necesariamente estrategias que apuesten por un crecimiento económico asociado a la economía circular y, por supuesto, que no dejen a nadie atrás. Solo de ese modo podremos reducir las emisiones de dióxido de carbono y adoptar un modelo más sostenible.
El quinto informe de evaluación del IPCC, publicado en 2014, impulsó la hoja de ruta del Acuerdo de París de 2016, el pacto internacional para la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero. Sólo el tiempo dirá si esta última llamada de atención por parte de los expertos servirá para salvar el planeta.
Articulo obtenido de https://www.sostenibilidad.com/cambio-climatico/informe-ipcc-cambio-climatico-2021/?_adin=0872133180
Informe completo en https://www.ipcc.ch/assessment-report/ar6/